Uno de los últimos avances en la odontología es la tecnología CAD-CAM. Esta novedosa técnica permite reproducir de manera digital y tridimensional una prótesis dental de una boca que ha perdido una o varias piezas dentales.
Este sistema fue introducido de forma experimental por primera vez en 1.971 en Suiza y desde entonces se han desarrollado gran cantidad de sistemas, cada vez más sofisticados, que buscan ofrecer al profesional un mayor rendimiento para realizar los tratamientos.
Primeramente, el especialista realiza un escaneado digital de toda la boca. A partir de la imagen captada, el software diseña la prótesis de las piezas que se desean restaurar. A continuación, el sistema transfiere esos datos a una máquina fresadora que será la encargada de tallar el diente a partir del bloque de resina.
De esta manera, obtenemos múltiples ventajas. Entre ellas, proporcionar al paciente una solución prácticamente inmediata en una sola sesión, ante la pérdida o fractura de un diente, logrando reducir los plazos de la fabricación. Su resultado, además, es de alta calidad, rápido y muy estético.
Otro de sus beneficios, es que el mismo profesional que trata al paciente es quién realiza la preparación y diseño de esa pieza, y así puede captar la estética que le ha comunicado éste -el paciente- sin que se pierda información.
La Dra. Mónica García-Mussons Barroso, directora médica de Clínicas Verdi, junto al director general Manuel Acebal.
Es una técnica habitual en los tratamientos de carillas. Además, sirve como guía para el profesional para saber cuánto hay que reducir la pieza dental y, de este modo, permite ser más conservador.
