Joaquim Clos ha diseñado personalmente su sushibar soñado, elevando la experiencia con bodega de sakes y cocina caliente a la robatayaki.
Derby Hotels Collection, y en especial su Director General Joaquim Clos, presentan OS-KURO, un japonés que rompe expectativas. OS-KURO es un proyecto personal de Joaquim Clos, y su objetivo es ofrecer cocina japonesa tradicional, servida por un equipo de profesionales que aman y respetan la cultura nipona. El equipo de OS-KURO es un crisol de nacionalidades, con un objetivo común: ofrecer una gastronomía japonesa pura, fiel a la tradición y con producto de máxima excelencia.
El nombre, OS-KURO, refiere a la característica principal del local: la oscuridad (“kuro” significa “negro” en japonés). Aunque con acceso directo desde la bulliciosa calle Valencia de Barcelona, la penumbra al entrar es envolvente y transporta al comensal hacia una atmósfera íntima, elegante y sofisticada.
El mejor pescado de las lonjas españolas se exhibe y se trabaja en la barra y frente a las pocas mesas privilegiadas desde las que contemplar el espectáculo del sushiman. Una escalera de caracol transporta al comensal a un segundo espacio, un restaurante pensado para el disfrute de la sobremesa y propicio a compartir, conversar y disfrutar.
Una pared tapizada de sakes precede a la acomodación en sala, previo paso ligero por una cocina abierta y medida al milímetro. Allí se aplica la cocción justa y el correcto emplatado a platos como el Yakisoba de gambas rojas, el Bacalao Miso, el Wagyu japonés o el Bogavante y sisho, únicos en la ciudad.
Una selección de hasta 9 referencias de sake, componen en OS-KURO una posibilidad sorprendente de acercarse al universo de esta bebida fascinante y singular. Y ser entendida como maridaje y percibida como elemento crucial de la experiencia en OS-KURO.
La extrema calidad del producto se intuye en el minimalismo de la zona de fuegos y sus herramientas. Excelencia en estado puro y una impecable ejecución, es el lema del equipo al frente de OS-KURO.
OS-KURO nace con elegancia, sabor y espíritu evolutivo en el alma. Su proyección, desde el inicio, es convertirse en un gran japonés de Barcelona, a pocos metros del Paseo de Gracia.