Por Sara Carmona, (@sara.carmona.h) influencer y miembro del Team Challenge del Club Bonasport.
Una de las principales ventajas de cycling es que se trata de un deporte que puede practicar cualquier persona, independientemente de su forma física porque es uno mismo el que determina la intensidad y la resistencia que quiera aplicar en el pedaleo. De esta manera, puedes empezar poco a poco e ir aumentando la intensidad a medida que se gana confianza.
Otro punto a favor es que es rápido y efectivo: puedes mejorar tu capacidad aeróbica, quemar grasas y ponerte fuerte. Además, el cycling se practica en grupo y con música, que marcará el ritmo, la intensidad y nos ayudará a pedalear sin pensar. En este sentido, el cycling supone la combinación perfecta para llevar una vida activa y saludable.
Iniciación al cycling
Antes que nada, para poder realizar las clases de forma adecuada y no sufrir dolor ni lesiones, es fundamental ajustar bien la bicicleta desde el primer momento.
- Altura del sillín: Se debe tener una posición cómoda, sin notar dolores de espalda-lumbar ni rodilla.
- Posición del manillar: Se deben mantener los codos semiflexionados para evitar sobrecargas de hombros, trapecio y cuello. Para ello, deberás posicionarlo más o menos cerca del cuerpo.
- Ropa adecuada: Aunque el cycling no requiere de un material muy específico, si tu idea es realizar algunas sesiones por semana, es recomendable llevar ropa de ciclista y calzado con calas para poder hacer un pedaleo más efectivo y seguro.
Hoy en día, las clases de cycling no se basan solo en pedalear sino también en superarte en cada sesión, observando y analizando tu rendimiento, capacidad y por lo tanto tu evolución. Si realizas las clases en compañía, puedes compararte con el resto de asistentes y motivarte para dar lo mejor de ti.